El Instituto de Investigación Cultural ha recorrido cinco parques nacionales en Serbia y descubrió los valores naturales, culturales e históricos que éstos esconden, y cómo pueden aprovecharse sus ventajas para convertirlos en uno de los principales destinos turísticos de Serbia. Escribe Tijana Pavicevic.
Serbia tiene cinco parques nacionales: Kopaonik, Tara, Sar-planina, Djerdap y Fruska Gora. En ellos se encuentran los mayores valores naturales y geológicos, pero también culturales e históricos de Serbia, dijo Dejan Zagorac- representante del Instituto de Investigación Cultural. Cuando en la época prehistórica se separaron los Cárpatos del sur, y la potente masa de agua del Mar de Panonia y del Danubio corrió tempestuosamente hacia el Mar Negro, se formó el Cañón de Djerdap. El Parque Nacional de Djerdap es la primera de las cinco maravillas de la naturaleza en Serbia, destacó Zagorac. El añadió que muchos remolinos llegan hasta una profundidad de 93 metros y que en ningún sitio de Europa se ha medido una profundidad fluvial mayor.
Según la leyenda, la montaña de Tara, la habitaba una tribu iliria – los autariatas, y fueron ellos los que le dieron el nombre de su dios Tar. “En esta región la silvicultura organizada tiene una tradición de dos siglos, pero a diferencia de la silvicultura, el turismo está poco desarrollado,” dijo Ivanka Tadic, directora de la agencia turística “Panacomp”, de Novi Sad y añadió que lo más importante es librarnos de la basura, porque esto obstaculiza en cierta medida el desarrollo del turismo en esta región. Ella considera que solo los optimistas y los amantes de su trabajo pueden levantar a un nivel más alto el turismo, porque lamentablemente, las instituciones estatales no muestran el debido interés para ello”.
“Quién no ha visitado todavia Sar Planina – “montaña de los ojos serranos”, Fruska Gora – “Oasis de la llanura de Panonia”, o la “majestuosa” montaña de Kopaonik, y no les ha admirado”, dijo Miomir Korac del Instituto Arqueológico de la Academia Serbia de Ciencias y Artes y director del proyecto “Viminacium”. El añadió que lamentablemente, el público no conoce suficientemente los contenidos de los parques nacionales de Serbia y explicó que todas las investigaciones arqueológicas las están realizando los aficionados a su trabajo, por lo general voluntariamente. El considera que “no podemos presentar a Europa nuestras más bellas obras”, pero tenemos algo que es muy bueno y eso es, como destacó, “la energía de la población local”.
Los participantes del encuentro coincidieron que Serbia es un destino ideal para todos los que añoran un descanso aventurero en la naturaleza, y con esta conferencia, el Instituto de Investigación Cultural se ha adherido a la conmemoración del Día Mundial del Medio Ambiente.
Fuente: ( Glassbirje )
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